
omo hemos visto son varios los aspectos que hay que tener en cuenta para la correcta limpieza de empresas. Lo principal a tener en cuenta es la periodicidad, normalmente suele establecerse un par de veces a la semana, aunque esto va a venir determinado tanto por el número de trabajadores de la empresa como por la naturaleza del negocio. Una empresa de atención al público necesitará más días a la semana de servicios que unas oficinas donde no entra gente ajena a la compañía.
Las empresas suelen ser espacios amplios con muchos recovecos en los que se acumula con facilidad el polvo y desperdicios, por ello debe aplicarse una rutina de trabajo que permita obtener los mejores resultados.
- Ventilación de las estancias. Lo ideal sería poder comenzar por la ventilación de las instalaciones para renovar el aire existente. Este paso no siempre se puede hacer, ya que, en ocasiones, mientras se lleva a cabo la limpieza de empresas, los empleados están en sus puestos de trabajo y no siempre se dan las condiciones para abrir las ventanas.
- Retirada de residuos y desperdicios. Sacar antes de nada los residuos que se hayan acumulado, y ocuparse de sacarlos de las instalaciones. Esto es muy importante si se conservan en las instalaciones residuos orgánicos que generan olor. Al retirarlos nada más empezar la tarea, conseguiremos que con la ventilación se vayan los posibles aromas.
- Eliminación del polvo: Esto comprende tanto la limpieza de polvo de modo manual de superficies y mobiliario como el adecentamiento con aspiradora de suelos.
- Limpieza de todas las superficies: incluye las paredes, las molduras y otros elementos como cables, regletas, conexiones eléctricas…
- Desinfección de equipamientos: al ser muchas personas en una misma estancia, es conveniente desinfectar los aparatos para evitar infecciones de cualquier tipo. Esto incluye teléfonos, ratones, teclados y demás tecnologías que pueda albergar bacterias en su superficie.
- Aspirado de alfombras: a pesar de que se limpien con la aspiradora, cada cierto tiempo necesitan una limpieza en profundidad para evitar que se incrusten desechos y se acumule porquería.
- Desinfección de estancias sensibles: hay espacios especialmente sensibles, que requieren una limpieza profunda y con productos adecuados. Son estancias como los baños, las cocinas o la cafetería de la empresa, donde las bacterias y los focos de infección pueden proliferar más rápido que en otros lugares. Son necesarios productos específicos para asegurar la correcta desinfección.
- Limpieza de ventanas: no es necesario realizarlo de forma semanal, se puede espaciar más. Este servicio de limpieza depende mucho de la meteorología y de la ubicación de la empresa.